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Hoy os hablaré de uno de los minerales más utilizados en los complementos alimenticios y sobre el que más preguntas nos habéis formulado en la farmacia. Se trata del magnesio, un mineral esencial, presente en nuestro organismo que forma parte de muchas partes de nuestro cuerpo pero principalmente se encuentre en músculos, tendones y huesos. Gracias a él resolvemos, de forma natural, muchos de los problemas de salud que se nos presentan en la vida. Pero…
¿Qué alimentos son ricos en magnesio?
- Las legumbres tales como; garbanzos, lentejas y alubias.
- Los cereales tales como; mijo, trigo, arroz y avena
- Las semillas tales como; semilla de sésamo y semilla de lino.
- Los frutos secos tales como; almendras, nueces, avellanas y nueces.
- Las hojas verdes de las hortalizas: tales como las espinacas y las acelgas.
- El agua dura, con un alto contenido mineral.
Aquí os dejo una tabla que indica los mg de magnesio que podemos encontrar por cada 100 g de estos alimentos.
Es importante mencionar que del total que ingerimos nuestro organismo es capaz de asimilar sólo el 30-40% por nuestro organismo. Entonces…
¿Qué estados requieren un mayor aporte de magnesio?
- Personas con problemas de absorción del magnesio por la dieta.
- Personas que toman diuréticos, medicamento que tomados de forma continuada disminuyen el magnesio en sangre.
- Personas con tensión alta. El magnesio reduce la presión diastólica, (la máxima), en aquellos pacientes que padezcan una hipertensión leve y/o moderada.
- Personas diabéticas, con azúcar en sangre alto. Tener niveles bajos de magnesio está relacionado con un mayor riesgo de padecer diabetes y enfermedades cardíacas.
- Deportistas y personas con estrés. Tienen una mayor pérdida de magnesio aquellas personas con un mayor estrés físico y mental.
- Personas que sufren de acidez, estreñimiento. El magnesio neutraliza la acidez y es eficaz como laxante. Tanto en personas mayores como en niños.
- Mujeres en edad fértil, síndrome premenstrual (SPM) y con riesgo de padecer osteoporosis. El tomar suplementos de magnesio parece aliviar los síntomas de SPM, cambios de carácter, hinchazón, además de prevenir las migrañas premenstruales. Ayuda a fijar el calcio y el fósforo en los huesos y dientes por lo que previene la pérdida de masa ósea en mujeres con riesgo a padecer osteoporosis.
- Personas con colesterol elevado. El tomar suplementos de magnesio podría disminuir las LDL (colesterol malo) y colesterol total. Así como pequeños aumentos del HDL (colesterol bueno).
- Personas con cálculos renales. El magnesio parece prevenir los cálculos renales al movilizar el calcio.
- Personas con insomnio. El magnesio es un tranquilizante natural que ayuda a conciliar el sueño y la relajación.
- Personas cansadas, con astenia. El magnesio actúa como energizante.
- Personas con dolor muscular. El magnesio se utiliza como relajante muscular.
En la Naturaleza, el magnesio, no lo encontramos como metal puro y es por eso que en los preparados nos lo encontramos en forma de sal como; hidróxido de magnesio, bromuro de magnesio, fluoruro de magnesio. De todas ellas las más utilizadas en la industria farmacéutica son las sales de hidróxido de magnesio, cloruro de magnesio, carbonato de magnesio y las sales de fosfato magnésico. La duda viene cuando tenemos que escoger entre unas sales u otras.
¿Cuando elegir una sal u otra?
- La sal de hidróxido de magnesio la utilizaremos para tratar la acidez y los problemas de estreñimiento.
- La sal de cloruro de magnesio se suele utilizar para personas sometidas a mucho estrés o que padecen un desgaste físico importante. Esta sal la podemos encontrar en el agua embotellada, comidas para bebés, fórmulas para lactantes, suplementos dietéticos etc.
- La sal de carbonato de magnesio también se suele utilizar para personas que padecen acidez y en estados de cansancio crónico, bien por estrés o por depresión. Forma parte de mucho suplementos minerales que tenemos en la farmacia, incluso la podemos encontrar formulada con otros compuestos como el colágeno.
- La sal de fosfato magnésico se utiliza sobre todo en medicamentos homeopáticos para el tratamiento de cuadros espasmódicos: cólicos, dolores musculares, diarreas acuosas acompañadas de dolor abdominal y tos convulsiva en niños de corta edad. También se utiliza para personas que tienen tendencia a padecer migraña, y en diversas patologías menores como: flatulencias y problemas de la dentición, .
Espero que os haya sido de utilidad este artículo y cualquier pregunta que tengáis no dudéis en comunicarla.
Estela Sotoca Farmacéutica
